lunes, abril 09, 2007

El libro negro

Por fin pudimos ver este fin de semana esta película, que desde que se estrenó a principios de febrero, le tenía muchas ganas. Después de 6 años sin dirigir nada, Paul Verhoeven (o como coños se escriba, que no estoy seguro), vuelve por la puerta grande.

Aunque es evidente que las películas sobre la segunda guerra mundial, ambientadas en el mundo nazi, ya pueden resultar cansinas, por tantas y tantas y tantas que hay (mira que hay conflictos bélicos interesantes para relatar, como en África sin ir más lejos... y no digo nada de Black Hawk Derribado...). El caso es que esta película consigue interesar, asombrar y dejarte las dos horas y media que duran pegao al asiento. Y recalco lo de las dos horas y media porque me he quedao alucinao cuando he visto lo que duraba (hubiera jurado que duró hora y poco).


Tengo un cutis perfecto, pero no es por Garnier ni polladas de esas, es que desde que uso Beauline, mi vida ha dado un giro radical.


La película nos narra como Rachel (o Ellis, depende para quién) tiene que sobrevivir en la Holanda ocupada. Primero oculta en una granja, luego como refugiada de la resistencia, luego como espía en un cuartel nazi (genial la escena del tinte), y luego en tierra de nadie, que es cuando mejor lo pasa (¡y es una auténtica putada!). No había visto yo a esta chica jamás de los jamases en ninguna película, y tirando de imdb resulta que se llama Carice Van Houten, Holandesa imagino, que es la primera película internacional donde se da a conocer. Un valor esta chica, alucinado me he quedado con su interpretación, que es sencillamente de ÓSCAR. Las caras que pone cuando desde el agua mira como roban a su familia, como se pone cuando ve al responsable de su sufrimiento tocando el piano alegremente, cuando le dan a conocer la muerte de alguien importante para ella... Y además ha rodado una de las mejores escenas que he visto en mucho tiempo... Como se escapa del cabrón que la intenta asesinar, en su puta cara, resultando casi cómico, me pareció sencillamente brutal.

La película es de visión obligada, tiene un toque, un sabor clásico que la hace fantástica, con escenas geniales que quedan en la memoria, y... en fin, que todo son alabanzas para este fantástico pedazo de cacho de trozo de cine que lamentablemente ha pasado bastante desapercibido. ¡¡Hay que verla!!

2 comentarios:

AnamariDQ Con y Sin Merengue dijo...

¿y quién me dijo a mí que esa peli era una M? *-) Pos no ma' cuerdo. ¬¬

Yo soy Sam dijo...

Vaya, mira que oí que estaba bien y al final se me pasó. ¿Pero queda en algún cine? Si no, ¿como la has visto malandrín?
¿Me pasas el enlace?
Besotes.
P.D.: A ver El Buen Pastor pero ya.